Duke-NUS avanza en la búsqueda para retrasar el envejecimiento

El envejecimiento de la población traerá consigo desafíos colosales en materia de salud, social y económica en las próximas décadas[1]. A medida que las personas viven más tiempo, evitar el declive físico y la fragilidad que acompañan al envejecimiento se ha convertido en un Santo Grial, y se proyecta que las intervenciones efectivas desbloquearán importantes beneficios sociales y económicos. Las estimaciones sugieren que una desaceleración del envejecimiento que aumente la esperanza de vida en un solo año solo vale 38 billones de dólares.^[2] 

En un descubrimiento publicado en Nature, un equipo de científicos de la Escuela de Medicina Duke-NUS de Singapur puede haber encontrado una clave para retrasar el envejecimiento.

El equipo demostró en modelos preclínicos que la proteína interleucina-11 (IL11) promueve activamente el envejecimiento y que la administración de una terapia anti-IL11 no solo contrarresta los efectos perjudiciales del envejecimiento, sino que también aumenta la esperanza de vida. Su descubrimiento tiene el potencial de desempeñar un papel importante en los esfuerzos de los países para ayudar a su población a vivir más años con buena salud.

IL11 conduce a la acumulación de grasa y la pérdida de masa muscular, dos características clave del envejecimiento

En estudios preclínicos, el equipo encontró que con la edad, los órganos expresaban niveles crecientes de la proteína IL11, lo que, a su vez, promovía la acumulación de grasa en el hígado y el abdomen, y reducía la masa muscular y la fuerza, dos condiciones que son características del envejecimiento humano.

Según el equipo, estos resultados son los primeros en el mundo que demuestran que IL11 es un factor principal en el envejecimiento.

La primera y coautora correspondiente, la **doctora Anissa Widjaja**, profesora asistente del programa de trastornos cardiovasculares y metabólicos de Duke-NUS, dijo:

“Este proyecto comenzó en 2017 cuando un colaborador nuestro nos envió algunas muestras de tejido para otro proyecto. Por curiosidad, realicé algunos experimentos para verificar los niveles de IL11. A partir de las lecturas, pudimos ver claramente que los niveles de IL11 aumentaron con la edad y fue entonces cuando nos emocionamos mucho”.

La terapia anti-IL11 contrarresta los efectos del envejecimiento 

Después de establecer el papel de IL11 en el envejecimiento, el equipo demostró que mediante la aplicación de la terapia anti-IL11 en el mismo modelo preclínico, se mejoró el metabolismo, pasando de la generación de grasa blanca a la grasa marrón beneficiosa. La grasa marrón descompone el azúcar en sangre y las moléculas de grasa para ayudar a mantener la temperatura corporal y quemar calorías.

Los investigadores también observaron una mejora en la función muscular y una salud general mejor en su estudio, así como un aumento de la esperanza de vida de hasta un 25% en ambos sexos.

A diferencia de otros fármacos que se sabe que inhiben vías específicas involucradas en el envejecimiento, como la metformina y la rapamicina, la terapia anti-IL11 bloquea múltiples mecanismos de señalización importantes que se vuelven disfuncionales con la edad, ofreciendo protección contra la multimorbilidad de las enfermedades cardiometabólicas, la pérdida relacionada con la edad de la masa muscular y la fuerza, así como la fragilidad.

Además de estos cambios observables externamente, la terapia anti-IL11 también redujo la tasa de acortamiento de los telómeros y preservó la salud de las mitocondrias y su capacidad para generar energía.

El autor principal, el **profesor Stuart Cook**, profesor de medicina cardiovascular de la Fundación Tanoto en el Centro Médico Académico SingHealth Duke-NUS, quien también forma parte del programa de trastornos cardiovasculares y metabólicos de Duke-NUS, dijo:

“Nuestro objetivo es que algún día la terapia anti-IL11 se utilice lo más ampliamente posible, para que las personas de todo el mundo puedan llevar vidas más saludables durante más tiempo. Sin embargo, esto no es fácil, ya que las vías de aprobación de medicamentos para tratar el envejecimiento no están bien definidas, y obtener fondos para realizar ensayos clínicos en esta área es muy desafiante”.

El profesor Cook también es consultor principal del Departamento de Cardiología del Centro Nacional del Corazón de Singapur.

Al evaluar el potencial de la investigación, el **profesor Thomas Coffman**, **decano de Duke-NUS**, comentó:

“A pesar de que la esperanza de vida promedio ha aumentado notablemente en las últimas décadas, existe una disparidad notable entre los años vividos y los años de vida saludable, libres de enfermedades. Para las sociedades que envejecen rápidamente como la de Singapur, este descubrimiento podría ser transformador, permitiendo que los adultos mayores prolonguen el envejecimiento saludable, reduzcan la fragilidad y el riesgo de caídas, al tiempo que mejoran la salud cardiometabólica.

“Esta última investigación es un ejemplo perfecto de las contribuciones de Duke-NUS al ecosistema biomédico de Singapur. En todo el Centro Médico Académico SingHealth Duke-NUS, nuestros investigadores y científicos clínicos realizan investigación verdaderamente traslacional, llevando los descubrimientos de la mesa de laboratorio a la cama, beneficiando a las personas en Singapur y en todo el mundo”.

La investigación previa del equipo sobre el papel de IL11 en el corazón y el riñón (publicada en Nature en 2017), el hígado (publicada en Gastroenterology en 2019) y el pulmón (publicada en Science Translational Medicine en 2019) condujo al desarrollo de una terapia anti-IL11 experimental.

En este último trabajo, el equipo de Duke-NUS colaboró con científicos del Centro Nacional del Corazón de Singapur; el Laboratorio de Ciencias Médicas MRC del Reino Unido; el Centro Max Delbruck de Medicina Molecular de Alemania; y la Universidad de Melbourne en Australia.

Duke-NUS es un líder en investigación biomédica académica con una misión de avanzar en la comprensión de la salud y la enfermedad, y colabora con socios clínicos e industriales para llevar los descubrimientos de investigación traslacional de la mesa de laboratorio a la cama.

Esta investigación está respaldada por el Consejo Nacional de Investigación Médica del Ministerio de Salud de Singapur en virtud de sus programas MOH-STaR21nov-0003 y NMRC MOH-OFIRG21nov-0006, con apoyo adicional de varias otras subvenciones y donaciones filantrópicas.

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